Gran noticia –principalmente por la influencia que tiene sobre el conjunto de la economía– aparecida en el diario Expansión que nos habla de como sube tanto el precio de la vivienda como las ventas de las mismas.
Se trata de subidas importantes, como hacía años que no se veían, que vienen a confirmar el afianzamiento de la recuperación del sector.
Y eso, que es una muy buena noticia para algunos, puede no serlo para todos. Sobre todo para aquellos que estén pensando en comprar una vivienda precisamente en estos momentos.
Hace más de dos años que aquí hablábamos de como ya se habían agotado prácticamente las auténticas oportunidades en el mercado. Si en aquel momento ya casi no quedaban, pues imaginad ahora.
Los precios están ya a niveles de 2004. Y el artículo sigue diciendo que siguen un 26% por debajo del precio de 2007. Aunque claro, ese precio es el pico de la burbuja, así que es difícil que lleguemos a él.
Bueno, o quizás no. No nos olvidemos de la diferencia entre el coste de financiación (tipos de interés) que había en 2.007 y el que tenemos en la actualidad.
Total, que para quien vaya a comprar una vivienda, le va a interesar lo que pase con dos precios. El de compra –lo que se gasta por adquirir la vivienda– y el de venta del día que se desprenda de ella.
La diferencia entre ambos precios será lo que gane o pierda con la operación. Visto así es fácil, ¿no?
Pues bien, por lo que respecta a los precios de compra, la noticia no es la mejor puesto que han subido. Habría sido muchísimo mejor comprar hace un par de años.
¿Y qué pasará con los precios el día que quiera venderla? Pues ahí tenemos la pregunta del millón.
Como ya apuntábamos aquí, hay toda una serie de factores que nos influirán en la evolución de los precios. En realidad hay más factores que los que menciono en el artículo. Pero en él quise centrarme en los que, desde mi punto de vista, podrían tener más influencia en el futuro próximo.
Total que mi impresión –y es solo una impresión– es que las subidas actuales se deben principalmente a dos factores.
El primero es la mejora de la confianza de la gente. Estaremos todos de acuerdo que el ambiente que se respira es muy distinto hoy de lo que era hace apenas dos años.
El segundo es la bajada continuada del coste del dinero desde hace más de un año lo que ha abaratado la hipotecas de una manera espectacular.
Y este segundo factor acabará cambiando tarde o temprano y eso tendrá un efecto clarísimo para mi. Encarecerá las hipotecas lo que acabará presionando los precios a la baja. Aunque no sabemos cuanto.